Hoy, con el permiso del Centro Virtual del Instituto Cervantes, y su revista El Trujamán, nuestro amigo Ricardo Bada, nos habla de las traducciones de Orgullo y Prejuicio
Ricardo es periodista y escritor, colaborador en múltiples publicaciones y siempre una una afilada pluma dispuesta a escribir sobre autores, el mundo o el día a día. Y que no se nos olvide, un gran austenita. Puedes leer su blog aquí.
Hay frases iniciales de libros que forman parte del disco duro
imborrable de cualquier lector: «En un lugar de la Mancha de cuyo nombre
no quiero acordarme», «Nel mezzo del camin di nostra vita»,
«Las familias felices no tienen historia», «La heroica ciudad dormía
la siesta», «No hay más que un problema filosófico verdaderamente
serio: es el suicidio»…
Pues bien: con la frase inicial (o más bien iniciática) de Pride and Prejudice, esa obra maestra de la Weltliteratur,
Jane Austen le planteó un tremendo desafío a todos sus traductores.
Vamos a recordarla, paladeándola como un buen licor de hierbas, helado y
reconfortante:
It is a truth universally acknowledged, that a single man in possession of
a good fortune must be in want of a wife.
However little known the feelings or views of such a man may be on
his first entering a neighbourhood, this truth is so well fixed in the
minds of the surrounding families, that he is considered as the
rightful property of some one or other of their daughters.
En una edición española de Orgullo y prejuicio, su traducción dice lo siguiente:
Es verdad universalmente admitida que un soltero poseedor de una gran fortuna ha de necesitar esposa.
Aunque poco se sepa de las opiniones y sentimientos de un hombre en estas condiciones a su llegada a un vecindario cualquiera, está tan arraigada esta creencia que las familias lo considerarán, con la mayor naturalidad, como propiedad indiscutible de una u otra de sus hijas.
En la edición de la Colección Austral se encuentra castellanizada de este modo:
Es verdad universalmente admitida que un soltero poseedor de buena fortuna tiene que necesitar una mujer.
Aunque los sentimientos y opiniones de un hombre así sean poco conocidos a su llegada a un punto cualquiera, está tan arraigada aquella creencia en las familias que le rodean, que le consideran como propiedad indiscutible de una u otra de sus hijas.
En una edición mexicana, la novela comienza así:
Es una verdad universalmente reconocida que al hombre soltero, poseedor de fortuna cuantiosa, le hace falta casarse.
Cuando un hombre de esta categoría fija su residencia en una localidad, las familias convencidas, que llevan grabada aquella verdad en su inteligencia, le consideran como legítima propiedad de alguna de sus hijas.
El prólogo de esta edición mexicana es de Sergio Pitol, quien se refiere a esa primera frase de Orgullo y prejuicio como una joya de la literatura universal, igual que la de García Márquez en Cien años de soledad, pero él mismo la cita de manera distinta al texto que prologa:
Es una verdad universalmente reconocida que un hombre soltero en posesión de una buena fortuna debe buscar esposa.
Audazmente, sugiero que las 71 palabras originales también podrían trasladarse así:
Es una verdad universalmente reconocida que un soltero poseedor de una considerable fortuna tiene que andar necesitado de una esposa.
Aunque a su llegada a un lugar se conozca poco de los sentimientos y opiniones de un hombre así, esta verdad está tan arraigada en las mentes de las familias vecinas, que lo consideran como legítima propiedad de una u otra de sus hijas.
En el estuche de la película de la espléndida miniserie de la BBC (protagonizada por Jennifer Ehle y Colin Firth —la mejor pareja Lizzy / Mr.
Darcy de la Historia—), nuestra frase reza: «Es una verdad
universalmente reconocida que un hombre soltero que posee una buena
fortuna necesita una esposa», pero en el doblaje queda reducida a un
comentario de la protagonista cuando su padre le pregunta a su madre
por qué es importante que Mr. Bingley haya alquilado Netherfield:
«Porque un soltero en posesión de fortuna tan sólo desea una esposa».
La paupérrima transferencia de sentido que revelan esas palabras, no le
hace honor a Jane Austen, pero este tema del texto de las grandes
obras miniaturizado para adaptaciones al cine y a la TV, mejor es no tocarlo: como todas las heridas abiertas, duele.
Lo más curioso es que el meollo de la cuestión se concentra en nada
más que siete palabras aparentemente sencillas de trasladar de un
idioma al otro: «must be in want of a wife», para las cuales se nos proponen siete soluciones distintas.
No se quejen: tienen donde elegir.
Ricardo is journalist and writer, he collaborates with many publications and his sharp pen is ready to write about writers, the world or the day we are living. And we cannot forget he's a great Janeite.You can read his blog here.
There are starting quotations in the books that belong to the impossible to erase-hard drive of every reader: «En un lugar de la Mancha de cuyo nombre
no quiero acordarme», «Nel mezzo del camin di nostra vita»,
«Las familias felices no tienen historia», «La heroica ciudad dormía
la siesta», «No hay más que un problema filosófico verdaderamente
serio: es el suicidio»…
So: with the starting quotation (or started) of Pride and Prejudice, that master work of the Weltliteratur,
Jane Austen made a great challenge to all the translators. Let's remember it, let's taste it like a good herb liquor, frozend and refresing:
It is a truth universally acknowledged, that a single man in possession of
a good fortune must be in want of a wife.
However little known the feelings or views of such a man may be on
his first entering a neighbourhood, this truth is so well fixed in the
minds of the surrounding families, that he is considered as the
rightful property of some one or other of their daughters.
In one Spanish edition of Orgullo y prejuicio, its translations says the following thing:
Es verdad universalmente admitida que un soltero poseedor de una gran fortuna ha de necesitar esposa.
Aunque poco se sepa de las opiniones y sentimientos de un hombre en estas condiciones a su llegada a un vecindario cualquiera, está tan arraigada esta creencia que las familias lo considerarán, con la mayor naturalidad, como propiedad indiscutible de una u otra de sus hijas.
In the Colección Austral you find a version of Spain Spanish in this way:
Es verdad universalmente admitida que un soltero poseedor de buena fortuna tiene que necesitar una mujer.
Aunque los sentimientos y opiniones de un hombre así sean poco conocidos a su llegada a un punto cualquiera, está tan arraigada aquella creencia en las familias que le rodean, que le consideran como propiedad indiscutible de una u otra de sus hijas.
In a Mexican edition, the novel starts as follows:
Es una verdad universalmente reconocida que al hombre soltero, poseedor de fortuna cuantiosa, le hace falta casarse.
Cuando un hombre de esta categoría fija su residencia en una localidad, las familias convencidas, que llevan grabada aquella verdad en su inteligencia, le consideran como legítima propiedad de alguna de sus hijas.
The prologue of this Mexican editions belongs to Sergio Pitol, who refers to this first quotation of Pride and Prejudice like a jewel of the universal literature, just like the quotation of García Márquez in Cien años de soledad (100 years of solitude), but he quotes it in a different way in his prologue:
Es una verdad universalmente reconocida que un hombre soltero en posesión de una buena fortuna debe buscar esposa.
Boldly, I suggest that the first 71 original words can be tranlated as:
Es una verdad universalmente reconocida que un soltero poseedor de una considerable fortuna tiene que andar necesitado de una esposa.
Aunque a su llegada a un lugar se conozca poco de los sentimientos y opiniones de un hombre así, esta verdad está tan arraigada en las mentes de las familias vecinas, que lo consideran como legítima propiedad de una u otra de sus hijas.
In the cover of the wonderful BBC miniseries (starred by Jennifer Ehle and Colin Firth —the best couple Lizzy / Mr.
Darcy of the History—), our quotation is: «Es una verdad
universalmente reconocida que un hombre soltero que posee una buena
fortuna necesita una esposa», but in the dubbing it is comprised to a comment from the main character when her father asks her mother about how important is the fact that Mr. Bingley has rented Netherfield:
«Porque un soltero en posesión de fortuna tan sólo desea una esposa».
The poorest transfer sense that show these words does not make honor to Jane Austen, but this subject about the text of the big literature works reduded in TV and film adaptations is better to be not touched: like all the wounds, it hurts.
The most curious thing is that the heart of the matter is assembled in nothing more than apparently simple 7 words to translate to the other language: «must be in want of a wife», for which we are proposed with 7 different solutions.
Don't complain: you have plenty to choose.
Fuente/Source: http://cvc.cervantes.es/trujaman/anteriores/abril_11/13042011.htm
Gracias a Ricardo y al Centro Virtual del Instituto Cervantes.
Me pregunto si en las ediciones que cita Ricardo Bada no se menciona el traductor o quiso evitar nombrar a los "pecadores". Vamos a mencionarlos aquí.
ResponderEliminarLa edición de la colección Austral, como sabemos, se trata de la traducción de José de Urríes y Azara, es decir es la primera traducción que se hizo de la novela en nuestra lengua.
La edición mexicana, específicamente se trata de la de editorial Porrúa para la colección Sepan Cuántos, pero el traductor es español: Amando Lázaro Ros (se trata de una de las traducciones más utilizadas por las editoriales).
En cuanto a la edición española que es la primera que cita, no es una de las que tenga en transcripción, me gustaría mucho saber la editorial y el traductor.
No lo sé, pero le preguntaré a Ricardo, a ver si puede recordarlo, pues el artículo publicó hace tiempo ;)
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